IRÁN: Riesgo de devolución de abogados/as afganos refugiados en Irán

IRÁN: Riesgo de devolución de abogados/as afganos refugiados en Irán

El OIAD está extremadamente preocupado por la decisión de la República Islámica de Irán de deportar a migrantes afganos a Afganistán. Entre estas personas migrantes se encuentran más de 23 abogados y sus familias, que corren el riesgo de ser detenidos y encarcelados arbitrariamente, así como de sufrir torturas o ejecuciones extrajudiciales.

Desde la toma del poder por los talibanes en agosto de 2021, los abogados/as afganos se enfrentan a importantes restricciones en el ejercicio de su profesión. Solo los profesionales aprobados por las autoridades talibanes pueden ejercer la abogacía ahora; los abogados/as son objeto de detenciones, amenazas e incluso asesinatos, en particular cuando se dedican a la defensa de los derechos humanos.

Además, las mujeres han sido excluidas de la profesión y se les ha prohibido el acceso a las instituciones judiciales, lo que a menudo las obliga a esconderse para escapar de las represalias.

En este contexto, varios abogados afganos objeto de represalias han huido a Irán con sus familias. Sin embargo, desde 2023, muchos refugiados afganos han sido devueltos a su país de origen por Irán.

La República Islámica de Irán ha ratificado la Convención de Ginebra sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951, que consagra el principio de no devolución en su artículo 33: «1) Ningún Estado Contratante podrá, por expulsión o devolución, poner en modo alguno a un refugiado en las fronteras de los territorios donde su vida o su libertad peligre por causa de su raza, religión, nacionalidad, pertenencia a determinado grupo social, o de sus opiniones políticas.».

La Convención contra la Tortura también recuerda, en su artículo 3, el principio según el cual: «1. Ningún Estado Parte procederá a la expulsión, devolución o extradición de una persona a otro Estado cuando haya razones fundadas para creer que estaría en peligro de ser sometida a tortura.».

Además de los riesgos relacionados con la dificultad de las autoridades de facto afganas para satisfacer las necesidades de su población, los abogados afganos están directamente expuestos a graves violaciones de sus derechos fundamentales. Las Naciones Unidas también han alertado sobre este riesgo en un informe publicado el 24 de julio de 2025, en el que se mencionan posibles «actos de tortura y malos tratos, detenciones y arrestos arbitrarios, así como amenazas contra su seguridad personal».

 

El Observatorio insta a las autoridades iraníes a que respeten plenamente el principio de no devolución consagrado en la Convención de Ginebra sobre el Estatuto de los Refugiados, ratificada por la República Islámica de Irán en 1976.

El Observatorio insta al Estado iraní a que ponga fin de inmediato a las expulsiones forzosas de todas las personas que corren el riesgo de ser perseguidas en Afganistán, en particular los profesionales del derecho.

El Observatorio pide que se garantice la seguridad y la protección contra toda forma de violencia, acoso o detención arbitraria de la abogacía afgana en el exilio.

El Observatorio anima a la República Islámica de Irán a cooperar con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y las ONG competentes a fin de garantizar una respuesta coordinada, humana y respetuosa del derecho internacional.

El Observatorio condena firmemente cualquier medida destinada a intimidar, expulsar o restringir los derechos fundamentales de los abogados afganos refugiados.