RDC: En el este del Congo, defender la justicia implica arriesgar la vida
A medida que se intensifican los combates en el este de la República Democrática del Congo (RDC), los defensores de derechos humanos, en particular los abogados/as, se convierten en el blanco de los grupos armados. Según la información recopilada y verificada por el Observatorio, se repite un inquietante patrón de amenazas, intimidaciones y actos de violencia grave.
Criminales liberados, abogados/as expuestos
En varias ciudades, especialmente en Bukavu y Goma, se produjeron fugas masivas que liberaron a personas condenadas por violaciones, violencia sexual y de género, y delitos graves. Su puesta en libertad ha alimentado un clima de impunidad y ha aumentado los riesgos para los profesionales de la abogacía que contribuyeron a su condena. Estos viven ahora bajo la amenaza permanente de criminales, a menudo vinculados a grupos armados que siguen activos en la región.
Los grupos armados en el centro del sistema
El control ejercido por el M23 y otras facciones armadas sobre una parte importante de las provincias de Kivu del Norte y Kivu del Sur sumerge a la población en un clima de inseguridad. Las fuerzas de seguridad oficiales, cuando están presentes, se muestran incapaces de proteger a los civiles. En este contexto, los profesionales de la abogacía especializados en la defensa de víctimas de crímenes de guerra o de violencia sexual y de género se convierten en objetivos directos, ya que son percibidos como una amenaza por los autores de estos crímenes.
Amenazas constantes y vidas devastadas
El patrón de persecución identificado incluye:
- Amenazas de muerte constantes;
- Tentativas de asesinato;
- Intimidación física y vigilancia
- Secuestros y desapariciones de personas que manejan información sensible.
Este acoso sistemático, a menudo por vía telefónica o mensajería, confirma la voluntad de eliminar físicamente a los y las abogadas que poseen información o han defendido casos delicados, impidiéndoles llevar una vida normal.
Esta presión constante obliga a muchas personas a vivir en la clandestinidad, abandonar su profesión o huir a zonas consideradas más seguras. Algunas de ellas se han visto obligadas a abandonar por completo su región de origen, perdiendo así sus referencias familiares y profesionales.
Represión y clima de miedo
Más allá de las amenazas selectivas, la situación general se caracteriza por una mayor represión contra la sociedad civil, incluyendo detenciones, secuestros y ejecuciones arbitrarias. La circulación incontrolada de armas refuerza el clima de inseguridad crónica, en el que cualquier protesta o actividad independiente puede equipararse a una oposición a los grupos armados dominantes.
La situación de la abogacía en el este de la República Democrática del Congo pone de manifiesto hoy una realidad incuestionable: defender la justicia o actuar en nombre de la justicia en la RDC equivale a poner en peligro la propia vida.
El Observatorio internacional de la abogacía en riesgo hace un llamamiento a las autoridades congolesas y a la comunidad internacional a:
- Establecer sin demora mecanismos específicos de protección para los abogados/as y defensores/as de derechos humanos, a fin de que puedan ejercer su profesión sin temor por su vida y no sean amenazados ni corran riesgos por sus actuaciones pasadas en el ejercicio de sus funciones;
- Reforzar la lucha contra la impunidad velando por que los crímenes cometidos en el este de la República Democrática del Congo sean juzgados por tribunales imparciales e independientes.
- Acelerar la aplicación de mecanismos de justicia transicional, indispensables para garantizar la verdad, la justicia y la reparación a las víctimas.